Hace 10 años que el Gobierno ecuatoriano prohibió fumar en el interior de bares y discotecas. Hoy en día tenemos mayor conocimiento de cómo afecta el tabaco a la salud oral y a la salud en general.
La noticia positiva es que el consumo de cigarrillo en el Ecuador bajó. La reducción se identificó después de que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) registrará que, en 1998 el 9.5% de la población de 15 años de edad en adelante fumaba cada día, mientras que en el 2014 ese hábito se redujo al 2.8%.
En iSmile siempre nos hemos comprometido con la salud de nuestros pacientes y nos unimos a la acción de conciencia sobre cómo afecta el tabaco a la salud oral.
No es ningún secreto saber que el tabaco afecta a nuestra salud en general pero no todo el mundo tiene claro de qué forma el tabaco ataca a las distintas partes de nuestro cuerpo. Por esta razón queremos explicar cómo afecta el cigarrillo a la salud oral:
1. el tabaco aumenta la predisposición de padecer periodontitis.
2. El tabaco provoca pérdida de piezas dentales.
3. El tabaco reduce la cicatrización de los tejidos y disminuye la efectividad de varios tratamientos.
El cigarrillo facilita la aparición de enfermedades periodontales, sin embargo, sus efectos pueden enmascarar los síntomas, evitando que detectemos su presencia y le pongamos un alto a esta patología de manera rápida.
Uno de los principales síntomas de la enfermedad periodontal es la inflamación de las encías y su sangrado durante el cepillado. Pero, el tabaco reduce el flujo sanguíneo, lo que puede provocar que las encías no sangren, aunque no se encuentren sanas y así la enfermedad periodontal pasa desapercibida.
Los componentes del cigarrillo, debilitan el sistema inmunitario, por lo que la boca pierde refuerzos para lidiar con infecciones y combatir la acumulación de placa bacteriana. De esta forma, el tabaco afecta a los dientes y encías de manera que predispone a padecer enfermedades periodontales como: gingivitis y periodontitis.
A medida que avanza la enfermedad periodontal y pasa de ser una gingivitis a una periodontitis, los síntomas evolucionan: las encías se retraen y el hueso se reabsorbe, provocando la pérdida de estabilidad de las piezas dentales.
El tabaco afecta a los dientes porque reduce la respuesta del organismo ante infecciones y facilita el avance de esta patología. La periodontitis destruye los tejidos de soporte de los dientes, siendo esta enfermedad la causa más frecuente de la pérdida de piezas dentales.
Dejar de fumar es necesario para que la respuesta al tratamiento periodontal sea efectiva. Los componentes del tabaco irritan la mucosa oral y pueden ocasionar lesiones y úlceras. El humo del cigarrillo más la disminución de las defensas del organismo, dificulta la cicatrización de los tejidos.
Por esta razón, la principal recomendación después de una extracción dental o al colocar un implante dental, es que el paciente deje de fumar. El humo del tabaco ralentiza la cicatrización de la herida y la osteointegración del implante, lo que puede provocar el rechazo y hace perder el implante.
El tabaco facilita la aparición de enfermedad periimplantaria, esto es cuando se acumula placa bacteriana y se llegan a infectar los tejidos que rodean al implante dental.
Sabías que un fumador tiene más riesgo de tener cáncer oral. En Ecuador se demuestra una tendencia creciente significativa en cáncer oral, en especial en grupos de jóvenes de entre 30 a 40 años según el Centro de Investigación de Salud Pública y Epidemiología Clínica de la UTE. El tabaco es una de las principales causas de la aparición de esta enfermedad: 9 de cada 10 personas que tienen cáncer oral son fumadores habituales.
El cáncer oral es uno de los 10 tipos de cáncer más frecuentes. Si eres fumador, ten presente cómo afecta el tabaco a tu salud oral y realiza visitas periódicas al odontólogo para prevenir su aparición. Realizar autoexploraciones ayuda a tener un diagnostico rápido y mejora el pronóstico.
El tabaco también afecta al aspecto de los dientes, a la imagen personal y a las relaciones sociales. Las sustancias tóxicas que contiene el cigarrillo tienen el efecto de teñir los dientes de amarillo. Los dientes de un fumador tienen ese aspecto porque los componentes del tabaco como: el alquitrán, la nicotina y los aditivos, se adhieren fácilmente al esmalte y tiñen la superficie, provocando la aparición de manchas amarillas y marrones.
Estos efectos ocasionan que los dientes tengan un aspecto sucio y afectan a la imagen personal. Para poder eliminar las manchas amarillas de los dientes es necesario realizar un aclaramiento acompañado de una profilaxis.
De igual forma, el cigarrillo provoca halitosis o más conocida como mal aliento. El olor a tabaco no es agradable, cuando el humo y las sustancias por las que está conformado entran en contacto con la boca, esta se reseca e irrita la mucosa oral y las vías respiratorias.
Esta es la razón de que los fumadores tengan el sentido del gusto y del olfato alterados, y este es el motivo de que no sean conscientes del mal olor que tiene su aliento.
Es aconsejable, no solo para la boca, sino para todo el organismo, dejar este mal hábito, además de acudir periódicamente al odontólogo para prevenir cualquier patología.
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